La red de Atención a las Adiciones, UNAD, pide en este 26 de junio marcado por la nueva normalidad, que se tenga en cuenta a las personas con problemas de adicciones al proporcionar medidas de recuperación para la ciudadanía, ya que ellas han sufrido especialmente esta pandemia.
Los colectivos más frágiles de nuestra sociedad: personas sin hogar, mujeres con problemas de adicciones, población reclusa, ex penitenciaria, migrante, personas con VIH ya se encontraban en los márgenes del sistema antes de la crisis del COVID-19. Por eso UNAD reivindica que en la reconstrucción sean tenidas en cuenta para que ninguna realidad quede silenciada.
En este sentido, UNAD, que trabaja en más de 210 puntos del Estado, se pone al servicio de las administraciones para dar respuesta a la situación actual. Y se ofrece a colaborar en la implantación depolíticas sociales encaminadas a atender a los colectivos más vulnerables, según un modelo de intervención acorde a la dignidad y no a la caridad o la beneficencia.
UNAD advierte que en estos momentos las entidades sociales que atienden a las personas con problemas de adicciones son más necesarias que nunca. Contribuyen con su experiencia y redes humanas a un abordaje verdaderamente eficaz de los problemas surgidos a raíz del COVID-19. Y en estos momentos enfocan su labor diaria a que nadie quede atrás.