Pero aún queda mucho por hacer. En este contexto, se ha puesto en marcha la campaña de la Casilla Empresa Solidaria, que este año se presenta bajo el lema ‘EmpreXas que marcan, para marcar el cambio’. Su finalidad es conseguir que el sector empresarial marque esta opción en el Impuesto de Sociedades, a través de la cual cualquier tipo de empresa, sea cual sea su tamaño y su sector, puede destinar el 0,7% de sus impuestos a financiar proyectos sociales de manera voluntaria y gratuita.
Es fundamental que las empresas se unan y marquen el cambio, ese cambio que la sociedad necesita para ser más justa, igualitaria e inclusiva. Esta es la síntesis y la razón de ser de la Casilla Empresa Solidaria del Impuesto de Sociedades, sobre la que Paquita Saquillo, vicepresidenta de la Plataforma del Voluntariado de España y coordinadora de Comunicación de la Plataforma del Tercer Sector y de la campaña Casilla Empresa Solidaria, explica sus principales detalles y virtudes en esta entrevista de la periodista Virginia Segovia en Soziable.es que reproducimos en El Periódico del Voluntariado
En un contexto social y económico como el que estamos viviendo tras la pandemia del coronavirus. ¿Por qué es importante que las empresas marquen la Casilla Empresa Solidaria?
Las empresas son una parte esencial de la sociedad, son agentes de cambio y transformación social y tienen un papel fundamental en el avance en la reconstrucción social. Por ello es importante que muestren su compromiso con la sociedad. Marcar la Casilla Empresa Solidaria es la mejor forma de hacerlo. Las empresas que la marquen pueden ser un ejemplo de compromiso con la causa por parte del tejido empresarial. Con un simple gesto, estarán apostando por el cambio y contribuirán a mejorar la eficacia de las entidades sociales para que estas puedan atender la demanda real y ayudar a la capacitación de los profesionales, así como al fortalecimiento y cohesión de las redes internas del Tercer Sector.
Todas las empresas y organizaciones que tengan que hacer el Impuesto de Sociedades pueden marcar la casilla. No importa su tamaño ni su sector. Además, es importante señalar que la marcación de la casilla es voluntaria y no supone ningún gasto adicional para la empresa. Es un win-win, todas las partes ganan.
Esta campaña se desarrolla por tercer año consecutivo. ¿Cuál es el balance que realizan desde el Tercer Sector?
Efectivamente, la Casilla Empresa Solidaria se puso en marcha en 2019. Para el Tercer Sector es fundamental una iniciativa como esta y estamos trabajando para conseguir que cada vez más empresas la conozcan y apuesten por marcarla. A pesar del poco tiempo que lleva en marcha, hacemos un balance positivo de la medida. Con todo, estamos convencidos, y por ello seguimos trabajando, de que hay mucho margen de mejora, especialmente en la recaudación. Queremos que todas las empresas del país, desde la más grande a la más pequeña, se conviertan en EmpreXas. En Empresas que marcan, para marcar el cambio.
¿Cuánto se ha recaudado en los ejercicios anteriores y cuánto se podría recaudar si todas las empresas marcasen la casilla?
Como decía, todavía tenemos mucho margen de mejora. En la primera edición, se recaudaron unos 33 millones de euros. Una cifra que se elevó hasta los 36,6 en la segunda. Sabemos que este año ha sido especialmente difícil para las empresas, pero esperamos seguir aumentando esa cifra.
Teniendo en cuenta los datos del último Informe Anual de Recaudación de la Agencia Tributaria, los ingresos por el Impuesto de Sociedades en el año 2020 fueron de 15.858 millones de euros. Si a este importe se le aplicase el 0,7%, se obtendría un resultado de 110 millones de euros, el máximo que se podría recaudar si todas las empresas marcaran la Casilla Empresa Solidaria
¿Qué tipo de proyectos se financian?
Aún estamos a la espera de que el Gobierno desarrolle el reglamento definitivo que regule el tipo de proyectos a financiar. Lo que sí podemos decir es que los fondos van destinados a proyectos estatales que permitirán disponer de diagnósticos e indicadores que mejoren las situaciones de desigualdad y pobreza que viven muchas personas.
Hay que apuntar que las ONG no son las destinatarias de los fondos, sino quienes se encargarán de ejecutarlos. Para defender los derechos de las personas y crear condiciones que mejoren sus vidas se necesita un Tercer Sector fuerte, con capacidad de interlocución y capacidad de incidencia política, social y económica. El Tercer Sector es más que nunca un actor imprescindible para el avance social y para que de verdad nadie se quede atrás.
Algunas empresas y las grandes patronales ya han manifestado su adhesión. ¿Cree que debido al contexto actual ha aumentado el compromiso empresarial con las causas sociales?
Exacto. Estamos llevando a cabo un trabajo intenso de relaciones institucionales para poder contar con el mayor número de empresas posible y son muchas las que ya han mostrado su apoyo a la iniciativa. Desde la CEOE a CEPYME, CEPES, CEAJE, ATA… Queremos contar con todas las empresas, sean como sean.
Como decía, este año ha sido un año difícil también para las empresas debido a la crisis económica generada por la pandemia. Sin embargo, estamos convencidos de que la solidaridad y el compromiso empresarial con la sociedad ha aumentado. Ahora es tiempo de ir más allá, y no solo de buscar beneficio económico, sino de ser socialmente responsables e involucrarse en acciones que repercutan de forma positiva en el entorno en el que operan.