La Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Trans y Bisexuales (FELGTB), Fundación Triángulo y la Asociación de Familias de Menores Trans ‘Chrysallis’ han hecho un llamamiento al Gobierno de España para desbloquear la ley trans con urgencia ante el «ascenso del discurso de odio de la ultraderecha».
Las negociaciones están estancadas, ante la falta de consenso entre los socios de Gobierno. Por ello, las entidades han pedido al Ministerio de Igualdad que unifique las leyes trans y LGTBI en un único texto, como le propone el PSOE. Y han planteado a la Vicepresidencia del Gobierno que, a cambio, incluya el derecho de autodeterminación trans en la legislación. Esa es la línea roja tanto de la cartera de Igualdad como de los colectivos que representan a las personas trans.
En este sentido, la presidenta de FELGTB, Uge Sangil, ha defendido que “el derecho de autodeterminación es una condición necesaria para la igualdad ante la ley y la igualdad social de las personas trans”. “No hay argumentos de peso para no aceptar esta cesión por ambas partes. Así se desbloquearían unos derechos y unas leyes absolutamente imprescindibles ante el ascenso del odio contra las personas trans y LGTBI”.
Espiral de violencia
La presidenta de Chrysallis, Ana Valenzuela, ha denunciado que ese estancamiento «está llevando a las personas trans y sus familias a situaciones de acoso y violencia que se traducen en atentados contra su salud física y psíquica”. “Esta inacción está dejando paso y abriendo espacios a los discursos de odio que a diario lanza la ultra derecha, liderada por Vox, en nuestro país”, ha advertido.
En este sentido, ha alertado de que actualmente, “hay menores trans bajo ingreso hospitalario por intentos autolíticos por las agresiones físicas y verbales que reciben. Y la falta de atención y credibilidad por parte de los sistemas sanitario y educativo”. Además, ha puesto de manifiesto que también hay familias que tienen que solicitar bajas o excedencias laborales para acompañar a sus menores trans. «Porque tienen miedo de salir a la calle por el señalamiento, la burla y la discriminación que sufren a diario. “Hay jóvenes incluso que prefieren aislarse para no sufrir este cuestionamiento y esta exclusión constantes”, ha declarado.
Asimismo, ha señalado que “las personas trans adultas también están siendo acosadas en sus redes sociales cada vez con más fuerza y están volviendo a escuchar insultos que creían prácticamente superados. Y jóvenes que prefieren aislarse a sufrir el cuestionamiento y la exclusión”.
«No se protegen los derechos»
Por su parte, el presidente de Fundación Triángulo, José María Núñez, ha recordado los últimos ataques de la ultraderecha al colectivo, como el no reconocimiento de la identidad de la diputada y activista Carla Antonelli en la Asamblea de Madrid.
También el cuestionamiento de la necesidad, recogida por ley, de impartir educación en diversidad en la Consejería de la Región de Murcia y en los Parlamentos de Andalucía y Madrid. O los ataques a las sedes de las entidades COGAM y Lambda en Madrid y Valencia.
Así, ha incidido en que “nos preocupa enormemente la consolidación de la ultraderecha en nuestro país. Por eso, no entendemos que desde el Gobierno central no se protejan los derechos alcanzados, ni a las personas trans y LGTBI con claridad”. “No se lucha contra los discursos de odio hacia las minorías con declaraciones, ni con palabras retóricas, se lucha con hechos. Por eso, le decimos al Gobierno que necesitamos hechos que nos protejan, no palabras. Necesitamos leyes, no retórica política”, ha defendido.