Entrevista a Mar Amate en El Periódico de Aragón

“Voluncloud es garantía de un voluntariado seguro y legal”

(Por Mario Gracia/ El Periódico de Aragón) En España son voluntarias unos 2,5 millones de personas, más del 50% en el ámbito de lo social. Resulta más difícil calcular el número de organizaciones que trabajan con voluntarios.

 En Entrevistas, PVE

La Plataforma del Voluntariado de España está formada por 78 entidades y plataformas (3.000 organizaciones). Pero muchas de las 29.000 entidades del tercer sector cuentan con voluntarios. La Plataforma del Voluntariado de España acaba de lanzar Voluncloud, una aplicación móvil gratuita que pone en contacto a personas voluntarias y organizaciones.

La semana pasada se reunió con la ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, Maria Luisa Carcedo. ¿Cuáles fueron las principales reivindicaciones que le trasladó la Plataforma del Voluntariado?

Queremos que el voluntariado esté en el centro de la agenda política. Siendo una actividad tan importante de participación de la ciudadanía dentro del tercer sector, y dado el valor añadido que aporta a todas las actividades de las organizaciones de acción social, lo que le pedimos al Gobierno es que el voluntariado esté presente en las políticas de este ministerio. Necesitamos un reglamento que debe desarrollar la ley de voluntariado del 2015, y la definición de una estrategia estatal de voluntariado liderada por el propio Ministerio de Sanidad, pero que implique al resto de ministerios y a las comunidades autónomas.

¿Hablaron con la ministra sobre la nueva gestión del IRPF?

Lo que ha pasado con el IRPF es que la descentralización de su gestión a través de las comunidades autónomas nos ha dificultado a las entidades sociales el proceso de coordinación y desarrollo de acciones conjuntas en las redes asociativas de ámbito estatal. Las entidades han quedado sujetas a los criterios de priorización de cada comunidad autónoma para colectivos y acciones y eso nos ha dificultado a la hora de organizarnos. Lo que nos ha ocurrido a las organizaciones del voluntariado es que se ha dado prioridad a otros colectivos y hemos quedado relegados a un segundo plano, quedando mermado el trabajo de nuestras organizaciones autonómicas (en nuestro caso, la Coordinadora Aragonesa de Voluntariado y la Plataforma de Voluntariado de Aragón). Como los voluntarios no perciben ningún beneficio económico, quizás se haya considerado que nuestras actividades no cuestan dinero, pero cualquier acción voluntaria conlleva unos costes importantes para su organización. Con motivo de esta descentralización ha habido un retroceso en el voluntariado y en todo el sector social.

¿Qué proponen?

Con el liderazgo de la Plataforma del Tercer Sector, estamos pidiendo un modelo de financiación estable. Estamos hablando de 2,5 millones de personas que hacen voluntariado. Es un activo social y de participación muy importante como para no mantenerlo. No podemos estar cada año esperando a ver si salen o no las subvenciones, sobre todo por todas las personas y colectivos a los que atendemos, ya que la pobreza, la exclusión o las personas mayores solas y sus necesidades siguen estando ahí, independientemente de si la convocatoria de ayudas sale en enero o en septiembre y con más o menos fondos. Por eso pedimos una financiación más estable, que no dependa de la coyuntura de cada año.

En pocas palabras, piden poder vivir sin tanta incertidumbre, ¿no es así?

Cada vez que empieza, hasta que no tienen las resoluciones de las convocatorias de subvenciones, las entidades no saben con cuánto personal van a poder contar ni a cuánto van a poder mantener, desconocen qué programas van a poder desarrollar… No saben tan siquiera si van a poder pagar la luz o el alquiler. Vivimos en la incertidumbre. Pero esa es una cuestión organizativa; el verdadero problema para la sociedad es que, entre tanto, las necesidades siguen estando en la calle.

¿Qué cambios ha supuesto la legislación estatal y autonómica sobre voluntariado aprobada en los últimos años?

Han supuesto una modernización, un ajuste de la norma a lo que las entidades ya estaban viviendo con sus voluntarios. El voluntariado es un fenómeno moderno y ha ido evolucionando. La nueva ley estatal define el voluntariado por lo que es, y no por lo que no es, como ocurría antes (por ejemplo, no es trabajo): es una acción que con carácter gratuito desarrolla una persona dentro de una organización que tiene unos fines de cambio y transformación social, e introduce la dimensión ética, los valores y principios asociados al voluntariado. Antes se recogían los derechos y obligaciones de las personas voluntarias; ahora también los de los beneficiarios. Elimina cualquier barrera de acceso al voluntariado, de acuerdo con la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapaciad y con los Derechos Humanos. Reduce la edad para hacer voluntariado a menores a partir de doce años. Y además de las entidades sociales fija otros agentes como impulsores del voluntariado: empresas, universidades y administraciones públicas. La ley estatal también contempla el fomento de la investigación dentro del sector y la creación de un observatorio del voluntariado.

¿También regula la ley en qué campos de acción se puede hacer voluntariado?

Sí, el voluntariado ha trascendido el ámbito de lo social para convertirse en un ejercicio del derecho de participación. Y la gente, solidariamente y para mejora de la sociedad, lo puede hacer con el medio ambiente, en actividades culturales o deportivas, en la educación, el ocio y el tiempo libre… Así hasta diez ámbitos diferentes, incluidos el social y de cooperación. Se abre el abanico porque lo importante es que la gente quiere participar, y que pueda hacerlo en el ámbito que más le apetezca o que se acomode a sus prioridades. Es tan voluntario quien está limpiando un bosque como aquel que colabora en un comedor social o el que acompaña a unos niños a visitar un museo.

La Plataforma de Voluntariado acaba de lanzar una aplicación móvil llamada Voluncloud. ¿En qué consiste?

En algo muy simple: pone en contacto a personas voluntarias con ofertas de voluntariado. Estas te llegan a tu teléfono. Es muy sencilla de manejar. Solo hay que marcar tus prioridades y tu disponibilidad horaria. La aplicación te geolocaliza y así las ofertas que se te notifican están dentro de área de acción. También te permite cambiar tu zona si te vas de vacaciones o te desplazas durante un tiempo y quieres hacer voluntariado en tu destino. Y para las entidades es un servicio de gestión del voluntariado. Son ellas mismas las que pueden subir ahí sus ofertas o enviar mensajes a sus personas voluntarias. Esta aplicación les proporciona también una nueva vía de incorporación de voluntarios.

¿Qué garantías ofrece Voluncloud?

La plataforma ejerce un control riguroso sobre las ofertas que se van subiendo a la aplicación. Además, todas las entidades que ofertan las actividades pertenecen a nuestra red asociativa, lo cual es una garantía de que, por ejemplo, ninguna de ellas va a tratar de amortizar un puesto de trabajo mediante voluntarios, como vemos en algunas ofertas de otras entidades. Voluncloud es garantía de un voluntariado de calidad, seguro y legal.

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